El instituto vasco de seguridad y salud laborales Osalan
considera como "un reto" que se debe afrontar lograr un mayor
afloramiento de las enfermedades profesionales, sobre todo de las más graves
(las pulmonares y los cánceres), al considerar que una gran proporción de las
mismas está "sumergida".
El subdirector
de Osalan, Pedro Pablo Uriarte, ha hecho esta consideración durante la
presentación en Bilbao del informe sobre siniestralidad laboral y enfermedades
profesionales 2012, a
la que ha asistido el consejero de Empleo, Juan María Aburto, y la directora de
instituto, Izaskun Urien.
El informe
evidencia la tendencia descendente de los accidentes en el trabajo en Euskadi
en los últimos años, confirmada en 2013, cuando hasta agosto se redujeron un
7,3 % respecto al mismo período del año anterior.
Según los datos
de Osalan, de enero a agosto se contabilizaron 19.252 accidentes laborales
(20.761 el año anterior), de los que 19 fueron mortales durante la jornada de
trabajo frente a los 23 del mismo período de 2012.
Asimismo, se
registraron hasta agosto 2 accidentes "in itinere" al ir o volver al
trabajo frente a los 4 del año precedente.
Durante el año
pasado, también se redujeron las enfermedades profesionales declaradas. En
concreto, se declararon un total de 2.615 enfermedades profesionales, un 8 %
menos que el año anterior.
El subdirector
de Osalan ha puesto de manifiesto que en "gran proporción" la
enfermedad está "sumergida" y que cuanto más se declaren estas
dolencias "mejor se ve la realidad".
Uriarte ha
destacado que "llama la atención" que el número de enfermedades
profesionales declaradas en 2012 por factores cancerígenos (un total de 7) sea
"tan bajo" ya que "es imposible que no haya más enfermedad
profesional por cáncer" en Euskadi.
A su juicio,
"hay una asignatura pendiente con la enfermedad profesional por
cáncer". "Es algo que tenemos mejorar claramente", ha concluido.
En su
intervención, el consejero Aburto ha destacado que en 2012 se redujo el índice
de incidencia de accidentes laborales en un 13 %, el descenso más acusado desde
el año 2000 -dicho índice fija el número de accidentes en el trabajo con baja
registrados por cada 100.000 trabajadores afiliados a la Seguridad Social-.
Según el
informe, el pasado año se contabilizaron en las empresas vascas un total de
25.307 accidentes laborales, 4.870 menos que en 2011, y se registraron 29
fallecimientos en el trabajo, un 24 % menos que el año anterior.
El mayor número
de accidentes mortales se contabiliza entre los trabajadores mayores de 45
años.
En el informe,
se cifra en 25.130 los años de vida perdidos entre 2000 y 2012 por la
mortalidad precoz debido a un accidente laboral.
También se
indica que entre los años 2008 y 2012 se ha producido una disminución media
anual de un 11,6 % en la tasa de accidentabilidad.
Para Aburto,
Euskadi va por "el buen camino" en este ámbito debido al trabajo de
prevención efectuado y a pesar de que desde agosto pasado han fallecido en
accidente laboral cinco trabajadores en el País Vasco.
El consejero ha
instado a no caer en "la autocomplacencia" y ha llamado a todos los
agentes implicados a trabajar contra la siniestralidad laboral, sin que recaiga
sólo en las instituciones la tarea de la prevención.
El objetivo,
según ha dicho, es "aproximarse lo más posible" a una tasa
"cero" de accidentes laborales.
La reducción de
la siniestralidad registrada en 2012 afectó a todos los territorios y sectores.
Los accidentes laborales se redujeron un 26 % en la construcción, un 23 % en la
industria, un 7 % en el sector servicios y un 8 % en el sector primario.
Respecto a los
accidentes "in itinere", los ocurridos al ir o volver al trabajo, en
2012 se registraron 8 accidentes mortales, un 11 % menos que el año anterior.
Los
responsables de Osalan han destacado el incremento de este tipo de accidentes
en el sector primario en un 113 %.
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