Las centrales denuncian que las políticas de
austeridad están repercutiendo en el repunte de la siniestralidad
En torno a un centenar de personas se concentraron ayer en
Oviedo bajo el lema «Ni un muerto más en el trabajo», una protesta con motivo
de la muerte del oficial de primera Isaac Fernández, de 58 años, en las
instalaciones del Tren de Bandas en Caliente (TBC) de Arcelor-Mittal en Avilés.
Tras guardar cinco minutos de silencio, los sindicalistas exigieron al
Principado «mayor dotación para poder evaluar la situación de las empresas en
materia de seguridad en riesgos laborales» y denunciaron que las políticas de
austeridad están repercutiendo en el repunte de la siniestralidad. Diez
personas perdieron la vida el año pasado en los centro de trabajo y dos camino
de ellos (in itínere). Este año son ya dieciséis los fallecidos, tres de ellos
in itínere.
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