Podría parecer sacado de una película de ciencia-ficción, en un
mundo robotizado, pero se trata del presente y ya se está instalando en
empresas.
El Instituto del Textil Aitex y TAG Ingenieros han desarrollado un sistema de
seguridad que permite la localización del trabajador –a través de equipos como
los chalecos, los guantes, las mascarillas y otros accesorios– de forma que no
pueda manipular maquinaria sin llevarlos puestos, y tampoco pueda acceder a
zonas restringidas, por ejemplo, o «escaquearse».
La base de estos dispositivos, la denominada Tecnología de
Identificación por Radiofrecuencia (RFID), data de hace unos siete u ocho años,
si bien su expansión y desarrollo tras la normalización, al estar homologada
por la Administración ,
es más reciente, desde el último lustro.
«Su misión es asegurar que el operario entra en la zona de
riesgo con el equipo adecuado», subraya el director de TAG Ingenieros. Incluso
permite bloquear máquinas para evitar un percance. El resto de funciones, al
tener localizado físicamente a su portador en todo momento, ya que el chip no
puede perderse, propicia mejoras en la organización y control del trabajo.
Para dar una idea de la relevancia de la prevención mediante
estas tecnologías, sus creadores difundieron datos del Instituto Nacional de
Seguridad e Higiene en el Trabajo, como que el 46% de los accidentes laborales
se producen la mayoría de las veces por descuidos, distracciones, despistes o falta
de atención. Y en más de un 80% de los casos de trabajadores que deben llevar
obligatoriamente equipos de protección, no existen en el centro de trabajo
medios para controlar que cumplen la normativa.
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