Unas 50.000 personas contratadas por
el Estado perderán sus empleos a lo largo de 2013
El Gobierno portugués planea despedir,
a lo largo del año que viene, a la mitad de todos los interinos contratados por
el Estado. Según varios periódicos portugueses, la cifra asciende a cerca de
50.000 personas. Pero Luis Montenegro, portavoz parlamentario del conservador
Partido Social Demócrata (PSD), formación del primer ministro Pedro
Passos Coelho, “estos
números no se corresponden a ningún cálculo real”. De cualquier manera,
Montenegro no fue muy claro después y se limitó a añadir: “La cifra será
inferior a lo que ha sido avanzado”.
De
lo que no hay duda es del texto-propuesta que el Gobierno ha remitido ya a los
sindicatos, perteneciente a una de las clausulas para el presupuesto del año
que viene, el más restrictivo de la historia moderna de Portugal. “Antes del 31
de diciembre de 2013 los servicios y organismos de las administraciones del
Estado, autonómicas y municipales reducirán, como mínimo en un 50%, el número
de interinos”. Sólo la Administración central empleaba, según el diario Público, cerca de 85.000 interinos, incluidos
los trabajadores de los hospitales y del Ministerio de Defensa.
La medida se incluye, pues, dentro de la línea de más
austeridad seguida por el Gobierno de Passos Coelho, que, debido a la presión social,
retiró hace unas semanas la polémica bajada general de sueldos a todos los
asalariados pero que, en contrapartida, prometió más recortes a fin de cumplir
con el déficit acordado con la troika. Así, el ministro de Finanzas, Vítor
Gaspar, la semana pasada, anunció una enorme (según sus propias palabras)
subida de impuestos a la vez que prometía menos gasto por ministerio.
El
secretario general de una de las dos principales centrales sindicales
portuguesas, la CGTP, Arménio Carlos, simplemente, calificó la propuesta como
el “mayor despido colectivo del que se tiene noticia”. Esta central sindical ha
convocado una huelga general para el próximo 14 de noviembre a fin de protestar
contra la política de ajustes del Gobierno portugués.
El
despido de todos estas decenas de miles de trabajadores incidirá, sin duda, en
el galopante paro portugués, que ya roza el 16% y que llegará, a lo largo de
2013, al 16,4%, según datos del Instituto Nacional de Estadística portugués.
Las previsiones económicas no permiten tampoco mirar con optimismo el futuro
cada vez más oscuro del país. Este año la recesión alcanza el 3% y, para el año
que viene, en contra de un crecimiento del 0,3% previsto hace meses por el FMI,
la economía, según las revisiones de este mismo organismo, reculará un 1% como
mínimo.
Otra
medida que acarreará el nuevo presupuesto es la subida de la edad de jubilación
para los funcionarios, que pasará de los 63 a los 65 años a partir de 2013.
La
buena noticia es la devolución de una de las dos pagas extras retiradas por el
Gobierno hace un año para todos los empleados públicos que cobran más de 1.100
euros. El Tribunal Constitucional, en julio, declaró ilegal la retirada de
estas dos pagas y el Gobierno se vio obligado a repensársela. Ahora bien: esta
paga extra recuperada no se les devolverá a los empleados públicos de una sóla
vez, según adelanta el diario Público ,sino
prorrateada en doce meses.