El
Ministerio de Sanidad elaborará "una lista de medicamentos de especial
seguimiento" y reforzará "las obligaciones" de la industria
farmacéutica para garantizar su seguridad.
EFE, MADRID |
El Gobierno ha prohibido este
viernes la comercialización a
domicilio y cualquier tipo de venta indirecta al público de medicamentos y productos sanitarios,
así como su publicidad. El Consejo de Ministros ha endurecido la Ley del
Medicamento para "ofrecer más garantías de seguridad y evitar la entrada
de fármacos falsificados" en España, ha señalado la vicepresidenta del
Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior a esta
reunión.
Ha advertido
de que ha crecido en internet la venta ilegal de fármacos y ha precisado que el
año pasado se actuó contra 125 páginas y se abrieron 73 expedientes por venta
de "lo que llaman" medicinas legales que, "con las originales, a veces solo comparten el color". "El objetivo es pasar de una
farmacovigilancia reactiva a una proactiva, para anticiparse a posibles
problemas causados por los medicamentos", ha indicado la vicepresidenta,
un objetivo del anteproyecto aprobado hoy por el que se modifica la Ley de
Garantías y Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios. El
Ejecutivo implementará además un formulario electrónico para que los
profesionales y ciudadanos puedan comunicar "sospechas de
reacciones adversas", incrementando así la participación ciudadana en esta
materia.
El Ministerio de Sanidad elaborará "una lista de medicamentos de especial seguimiento" y se "reforzarán las obligaciones" de la industria farmacéutica para garantizar su seguridad.
La iniciativa incorpora a España la normativa europea puesto que, desde la aprobación de la Ley del Medicamento, hace ya seis años, se han producido diferentes avances en farmacovigilancia y protección ante el riesgo de entrada de medicamentos falsificados, entre otras materias.
Según la vicepresidenta del Gobierno, se van a controlar "mucho mejor los principios activos" con los que se elaboran los fármacos, la venta de medicinas a través de internet y la prevención para que no lleguen al canal de suministro, con "un régimen de sanciones" que se aplicarán a los productos sanitarios, de cuidado personal y a los cosméticos. "Se prohíbe la venta a domicilio y cualquier tipo de venta indirecta al público de productos sanitarios", ha insistido Sáenz de Santamaría.
La iniciativa incluye nuevas "buenas prácticas de distribución", que reforzarán las garantías de seguridad en el suministro de medicamentos y un mayor control de todos los agentes que participan en esta cadena. Estipula asimismo el aumento de inspecciones a fabricantes de principios activos ubicados en terceros países junto con el control de los almacenes de medicamentos en las zonas francas.
"El objetivo principal es ofrecer nuevas garantías de calidad de los fármacos y mejorar la transparencia y comunicación en las decisiones que tienen relación con la seguridad de los medicamentos", ha apuntado la vicepresidenta. En cuanto a las variaciones de las autorizaciones de comercialización de medicamentos (dosis, vías de administración, etc.) se determina que todas, con independencia de si el procedimiento es nacional o europeo, van a estar sujetas a los mismos criterios de solicitud, evaluación y autorización.
El Ministerio de Sanidad elaborará "una lista de medicamentos de especial seguimiento" y se "reforzarán las obligaciones" de la industria farmacéutica para garantizar su seguridad.
La iniciativa incorpora a España la normativa europea puesto que, desde la aprobación de la Ley del Medicamento, hace ya seis años, se han producido diferentes avances en farmacovigilancia y protección ante el riesgo de entrada de medicamentos falsificados, entre otras materias.
Según la vicepresidenta del Gobierno, se van a controlar "mucho mejor los principios activos" con los que se elaboran los fármacos, la venta de medicinas a través de internet y la prevención para que no lleguen al canal de suministro, con "un régimen de sanciones" que se aplicarán a los productos sanitarios, de cuidado personal y a los cosméticos. "Se prohíbe la venta a domicilio y cualquier tipo de venta indirecta al público de productos sanitarios", ha insistido Sáenz de Santamaría.
La iniciativa incluye nuevas "buenas prácticas de distribución", que reforzarán las garantías de seguridad en el suministro de medicamentos y un mayor control de todos los agentes que participan en esta cadena. Estipula asimismo el aumento de inspecciones a fabricantes de principios activos ubicados en terceros países junto con el control de los almacenes de medicamentos en las zonas francas.
"El objetivo principal es ofrecer nuevas garantías de calidad de los fármacos y mejorar la transparencia y comunicación en las decisiones que tienen relación con la seguridad de los medicamentos", ha apuntado la vicepresidenta. En cuanto a las variaciones de las autorizaciones de comercialización de medicamentos (dosis, vías de administración, etc.) se determina que todas, con independencia de si el procedimiento es nacional o europeo, van a estar sujetas a los mismos criterios de solicitud, evaluación y autorización.