Los mercados
laborales centroamericanos "no han sido capaces" de proporcionar una
seguridad social a los trabajadores, principalmente a las mujeres que sufren de
una mayor desprotección, dijo hoy el director de la OIT para Centroamérica,
Haití y República Dominicana, Virgilio Levaggi.
"Los mercados (...) de la región
no han sido capaces de convertirse en una puerta de acceso universal para la
seguridad social; eso hace que un buen porcentaje de la población quede
excluida de ella y dentro de ese porcentaje importante (...) las mujeres son el
grupo mayoritario", dijo Levaggi durante un evento oficial celebrado en
San Salvador.
"De hecho, las mujeres que hoy
se han integrado más en el mercado de trabajo siguen teniendo más problemas de
empleo, siendo mayoría en el sector informal y además las encargadas de las
responsabilidades familiares", agregó el representante regional de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT) , aunque no suministró cifras
centroamericanas.
Las mujeres son uno de los grupos a
"cuyas necesidades deberían de dar respuesta de manera prioritaria los
pisos (mínimos) nacionales de protección social" , enfatizó Levaggi
durante su intervención en la presentación del estudio "Combatiendo la
desigualdad desde lo básico: Piso de protección social e igualdad de
género" .
El informe ofrece un marco conceptual
y una serie de instrumentos metodológicos de análisis del piso de protección
social en Centroamérica y República Dominicana con perspectiva de género.
El documento se centra
fundamentalmente en las garantías básicas de la seguridad social, destacaron a
través de un comunicado la OIT, el Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD) y ONU Mujeres, que auspiciaron el estudio.
Asimismo, precisaron que las brechas
de género son resultado de relaciones desiguales que ponen a las mujeres en
situaciones de desprotección por el menor acceso a la seguridad social desde el
mercado de trabajo, de vulnerabilidad por asumir casi exclusivamente las
responsabilidades familiares del hogar y de exclusión social por tener menor
acceso a los recursos y al poder.
Sólo en "El Salvador, de cada
100 mujeres salvadoreñas en edad de trabajar, solamente 47 logran participar en
la economía del país, frente a 82 hombres de cada 100", destacó el
representante residente adjunto del PNUD, Richard Barathe.
Además, "la tasa de subempleo de
las mujeres es de un 46% frente a un 37% para los hombres", agregó, al
tiempo que enfatizó que, "por cada dólar que reciben los hombres, las
mujeres sólo perciben 82 centavos de dólar".
"Las brechas de ingresos no se
explican por diferencias en el capital humano, sino por un sistema
sociocultural discriminatorio, ya que las mujeres con los mismos años de
escolaridad comparada con sus pares masculinos tienen en promedio salarios
inferiores" , destacó Barathe.