Se
autoriza la comercialización de OraQuick In-Home HIV Test, primer test que proporciona en unos
veinte o cuarenta minutos los resultados del análisis del VIH.
De este modo, la Agencia Estadounidense del Medicamente (FDA) aprueba el primer test casero que
permite hacer la prueba del Sida desde el hogar al tomar una pequeña
muestra del fluido oral frotando las encías.
El test está diseñado para detectar el VIH con un simple bastoncillo. En el caso que diera positivo, los resultados deberán ser confirmados mediante una muestra de sangre. El precio del aparato que saldrá a la venta sin receta médica será de unos 50 euros aproximadamente (unos 60 dólares).
De esta manera, los encargados de elaborar este test confían en que millones de americanos acudan a comprarlo para hacerse la prueba del Sida y poder así, diagnosticar casos desconocidos hasta el momento. La única beneficiada hasta el momento ha sido la compañía encargada de fabricarlos cuyas acciones han subido un 5,2% tras conocerse la noticia.
Las estadísticas oficiales de Estados Unidos revelan que alrededor de 1,2 millones de portadores del VIH desconocen que son portadores del virus causante del Sida. Con la llegada y difusión de esta prueba se permitirá poner en marcha un tratamiento y medidas preventivas para frenar las infecciones.
Aunque la FDA ya creó otros test caseros, OraQuick se convierte en el primero que no requiere que las pruebas se envíen a un laboratorio para obtener los resultados del Sida. La compañía anuncia que el test casero estará disponible a partir de octubre en más de 30.000 establecimientos de Estados Unidos, y facilitarán la venta por Internet.
Douglas Michels, presidente y director ejecutivo de la compañía establece que “por primera vez los individuos tendrán acceso a una prueba oral sin receta que puede hacerse en casa y les permitirá conocer su situación en la comodidad de sus hogares para que obtengan referencia (médica) si fuese necesario”.
El test está diseñado para detectar el VIH con un simple bastoncillo. En el caso que diera positivo, los resultados deberán ser confirmados mediante una muestra de sangre. El precio del aparato que saldrá a la venta sin receta médica será de unos 50 euros aproximadamente (unos 60 dólares).
De esta manera, los encargados de elaborar este test confían en que millones de americanos acudan a comprarlo para hacerse la prueba del Sida y poder así, diagnosticar casos desconocidos hasta el momento. La única beneficiada hasta el momento ha sido la compañía encargada de fabricarlos cuyas acciones han subido un 5,2% tras conocerse la noticia.
Las estadísticas oficiales de Estados Unidos revelan que alrededor de 1,2 millones de portadores del VIH desconocen que son portadores del virus causante del Sida. Con la llegada y difusión de esta prueba se permitirá poner en marcha un tratamiento y medidas preventivas para frenar las infecciones.
Aunque la FDA ya creó otros test caseros, OraQuick se convierte en el primero que no requiere que las pruebas se envíen a un laboratorio para obtener los resultados del Sida. La compañía anuncia que el test casero estará disponible a partir de octubre en más de 30.000 establecimientos de Estados Unidos, y facilitarán la venta por Internet.
Douglas Michels, presidente y director ejecutivo de la compañía establece que “por primera vez los individuos tendrán acceso a una prueba oral sin receta que puede hacerse en casa y les permitirá conocer su situación en la comodidad de sus hogares para que obtengan referencia (médica) si fuese necesario”.
hechosdehoy.com
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