PUBLICADO EN 'BRITISH MEDICAL
JOURNAL'
(EUROPA PRESS) -
Según una nueva investigación,
publicada en el 'British Medical Journal', de los 63.942 nuevos casos de
melanoma cutáneo que se diagnostican cada año en Europa, se estima que 3.438
están relacionados con el uso de camas solares. Así, los usuarios de camas
solares tienen un 20% más de riesgo de cáncer de piel, en comparación con los
no usuarios. Este riesgo aumenta si se inicia su uso antes de los 35 años.
La exposición al sol es la causa ambiental más importante del cáncer de piel, y
las camas solares se han convertido en la principal fuente no solar de exposición
a los rayos UV, en Europa occidental. Un estudio anterior, de 2005, ya había
señalado un riesgo un 75% mayor de melanoma, si el uso de camas solares se
inicia en la adolescencia, o en la edad adulta temprana. Sin embargo, hasta
hora, se desconocía el número de melanomas causados por las camas solares, en
Europa occidental.
Así, los autores del nuevo estudio, investigadores del Instituto Nacional de
Prevención y Educación para la
Salud , en Francia, y el Instituto Europeo de Oncología, en
Italia, analizaron los resultados de 27 estudios independientes sobre el cáncer
de piel, y el uso de camas solares, entre 1981 y 2012, recogidos en el Reino
Unido, Francia y Alemania.
Los autores observaron que el riesgo de cáncer de piel, relacionado con el uso
de camas solares, aumenta en un 20%, y se eleva al 87% si la exposición tiene
lugar antes de los 35 años de edad. Los autores estiman que, de los 63.942
nuevos casos de melanoma diagnosticados cada año en Europa occidental, 3.438 se
deben al uso de camas solares.
Los autores concluyen que el melanoma, y otros cánceres de piel, asociados con
el uso de camas solares, se pueden prevenir evitando la exposición a estos
aparatos de bronceado. Los investigadores defienden que la prevención debe
basarse en acciones más duras en la regulación de estos centros: el uso de
camas solares por menores de 18 años debe ser restringido, y los salones de
bronceado sin supervisión, prohibidos. Estas leyes ya están en marcha en
Australia, y varios países de Europa, mientras que en los Estados Unidos sólo
el Estado de California ha establecido esta prohibición.