UGT Asturias ha destacado este martes
que los datos de paro registrado en agosto contradicen lo manifestado por la
ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, en los cursos de La Granda
donde destacó los efectos positivos de la reforma laboral sobre el mercado de
trabajo.
En una nota de prensa, el sindicato señala que
"el mes de agosto arroja datos negativos donde se mantiene el proceso de
destrucción de empleo y el avance del paro con una incorporación de más de
14.500 desempleados más que hace un año a las oficinas del Servicio Público de
Empleo". Además, asevera que el incremento interanual del paro se produce
en Asturias (18,4%) con una mayor intensidad que la media
nacional (12%) en más de 6 puntos porcentuales, situándose Asturias
como la tercera autonomía con mayor aumento del desempleo.
UGT añade que "al aumento del paro se une el
descenso de la contratación", destacando la caída de los contratos
indefinidos (-8%) que muestra un peor comportamiento que la media nacional
(-6,5%). La organización alerta además de que "el peor comportamiento del
mercado laboral asturiano se extiende para todos los sectores de actividad, con
especial preocupación en el caso de la industria, por el efecto arrastre y su
peso sobre el conjunto de la economía y el empleo regional, así como el sector
de la construcción", "sin que se aprecien señales de finalización en
el proceso de ajuste del empleo a corto plazo en ninguno de ellos".
"A la vista de los datos se pone una vez más de
manifiesto la ineficacia de la reforma laboral que tras más de medio
año de aplicación se aleja de los objetivos de creación de empleo y de
estabilidad del mismo y cuyos resultados sólo han sido una regresión, sin
precedentes en los derechos laborales de los trabajadores, así como una
escalada en el número de despidos, al haberse facilitado y abaratado el
mismo", sostiene.
Asimismo, UGT cree que las cifras evidencian "el
rotundo fracaso de las medidas de ajuste practicadas por el Gobierno
de Rajoy, que lejos de dar una salida a la crisis lo que están provocando es un
deterioro irreversible en la actividad productiva y del empleo y un desgaste de
los servicios públicos esenciales y del modelo social".
Por último, cree que este escenario "hace más
necesario que nunca alcanzar acuerdos en el ámbito del diálogo social regional,
con especial importancia en lo relativo a las políticas activas de empleo, así
como en dinamización económica, la cohesión social y la prestación de servicios
públicos esenciales".