martes, 25 de septiembre de 2012

DIVULGATIVOS: MERKEL VUELVE A PONER A ESPAÑA DE EJEMPLO DE LO QUE NO SE DEBE HACER


La canciller alemana, Angela Merkel, ha vuelto a poner de ejemplo a España sobre lo que no se debe en la crisis. En este caso y tras sus pasadas intervenciones sobre la necesidad de ser austeros ir controlar el déficit, Merkel ha aludido a lo sucedido con la banca española, cuya delicada situación ha acabado obligando al Gobierno a pedir un rescate para sanear el sector, para defender la necesidad de evitar las prisas en el proceso de creación de una unión bancaria.
"Soy partidaria de que en la Eurozona se supervise mejor a los bancos", ha empezado Merkel para añadir, a continuación, que "el organismo supervisor europeo debe ser más vinculante". Por este motivo, ha abogado por avanzar paso a paso: "Yo no puedo decir nada sobre la recapitalización directa de los bancos cuando aún no tenemos un organismo capaz de intervenir". "(Ya) vimos en el caso de España cómo un organismo recién creado, la EBA, fue incapaz de cumplir su labor correctamente porque, al final, las influencias nacionales fueron otra vez demasiado fuertes", ha recordado.
Merkel, que se ha reunido este martes con el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha vuelto a insistir además en que es prematuro hablar de ayuda directa a los bancos de los fondos de rescate hasta que no esté en marcha el supervisor único. Sobre esta unión bancaria, la canciller ha reiterado que es imposible que el BCE asuma el control de las más de 6.000 entidades que hay en la eurozona este mismo enero, tal y como propone la Comisión Europea.
Además, Merkel ha advertido de que "en los mercados financieros hay una falta de confianza en la capacidad de algunos países de la zona euro para pagar sus deudas a largo plazo". "El mundo se pregunta cómo de competitivos son los países de la zona euro", ha dicho. En su opinión, solo se puede salir más fuerte de esta crisis y competir en un mundo globalizado si sus miembros llevan adelante dolorosas reformas y políticas presupuestarias más responsables.
Aunque ahora son dos los países que acaparan la atención por las incógnitas sobre su futuro a corto plazo, sobre todo España y la incertidumbre de si acabará por pedir activar un plan de asistencia financiero, hay uno de los socios que ha tenido que pactar una quita para poder seguir adelante: Grecia. La operación supuso, para los inversores, asumir una pérdida de más del 75% en su inversión.