Sentir la necesidad de bajarse del coche en plena
autopista, sufrir periodos de taquicardia durante la conducción o experimentar
sudores fríos son algunos de los síntomas que podrían indicar que
tenemos amaxofobia o pánico a conducir. Javier Díaz Calero es psicólogo
clínico, profesor de la autoescuela Gala y el pionero en tratar este
problema en España, que afecta a la rutina y disminuye la autoestima. A nivel
nacional no hay más de cinco autoescuelas capacitadas para tratar esta fobia,
lo que no favorece que se conozca: "Como somos pocos, la gente tiene
muy difícil encontrar apoyos positivos para superar este problema".
La causa de la amaxofobia
se encuentra principalmente en el estrés. "Puede ser postraumático a raíz
de un accidente de coche pero también afecta a conductores que no obtuvieron la
confianza suficiente en su aprendizaje y cuando se sacan el carné tienen
altibajos. Las mujeres abundan en este grupo", apunta Díaz y señala
que el caso que más se repite es el de personas con mucha experiencia al volante y
que debido a un divorcio o a la situación laboral desarrollan una inseguridad
que les lleva a la fobia.
El psicólogo asegura que en
la mayoría de los casos se cura «pero paradójicamente, superar una fobia
requiere de mucha valentía y cuanto más antiguo sea el problema, más
tardará en irse».
Javier Díaz estima que
entre el 9 y el 12% de los españoles tienen amaxofobia.