La Policía, tras detener a dos
personas, ha liberado a las doce personas que se encontraban encerradas en una
nave industrial
La Policía ha
liberado a doce personas, en su mayoría de origen
suramericano y en situación irregular en España, que
eran explotadas laboralmente por los propietarios de un negocio de recuperación
de residuos en Alcalá de Guadaira.
En un comunicado, la Policía explica
que han sido detenidos J.R.B.L. de 52 años, y M.A.G de 63, que encerraban a
estas personas en el interior de una nave industrial y les obligaban a
trabajar durante once horas separando chatarra en condiciones precarias, sin
contrato de trabajo y sin medidas de seguridad adecuadas.
Durante la investigación se comprobó
que en la nave trabajaban un total de doce personas que entraban a las ocho de
la tarde y salían a las siete de la mañana, una vez que el propietario de la
misma abría las puertas, siendo un total de 11 horas las que destinaban al
horario laboral.
"Las personas explotadas
-explica el comunicado- aceptaban permanecer encerradas en el interior de la
nave industrial para realizar trabajos para los que no contaban con medidas de seguridad necesarias tales como guantes, botas o
mascarillas para evitar inhalar el polvo de los residuos".
La Policía indica que no contaban con
ningún contacto con el exterior mientras que permanecían encerrados en el
interior de la nave y no podían salir hasta que los
propietarios de la misma aparecían a la mañana siguiente, lo cual dificultaba
enormemente las posibilidades de auxilio en caso de ocurrir algún accidente laboral.
Por su parte, los empresarios
aprovechaban la necesidad de dinero y la situación irregular en España para
imponer estas condiciones de trabajo entre ellas un sueldo que rondaba entre 20 y 30 euros,
dependiendo de la cantidad de chatarra que hubieran separado esa noche,
carecían de contrato laboral y de cualquier tipo de seguro social.