jueves, 16 de agosto de 2012

BREVES DE ACTUALIDAD: FALLECEN UN HOMBRE Y UNA MUJER POR UN GOLPE DE CALOR EN CÓRDOBA


El varón padecía obesidad mórbida y ella era una paciente pluripatológica tratada con varios medicamentos diarios, como insulina o diuréticos
Un hombre de 54 años y una mujer de 83 han fallecido en la provincia de Córdoba, en la capital y en Cabra, como consecuencia de un golpe de calor, según ha confirmado la encuesta epidemiológica realizada por la Delegación Provincial de Salud y Bienestar Social de la Junta en Córdoba, tal y como establecen los protocolos del Plan de Prevención de Altas Temperaturas.

Según informa la Junta en una nota, en los días previos de ambos fallecimientos se habían superado conjuntamente en la provincia los umbrales de temperaturas, máximas y mínimas, que establece el Plan de Prevención de los Efectos sobre la Salud de las Altas Temperaturas, y el nivel de alerta era naranja. 

En concreto, el hombre ingresó el sábado 11 de agosto en el Hospital Reina Sofía de Córdoba, donde murió ese mismo día. Al fallecido, que padecía obesidad mórbida, se le encontró inconsciente en su domicilio a las 7.30 horas de ese día y la facultativa que lo atendió ha confirmado que la temperatura en la habitación era muy elevada.
Por su parte, la mujer ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Infanta Margarita de Cabra el domingo 12 de agosto, donde falleció al día siguiente por golpe de calor. Se trata de una paciente pluripatológica tratada con varios medicamentos diarios, como insulina o diuréticos. Esta mujer residía con dos familiares y permaneció en el interior de su domicilio todos los días de la ola de calor sin aire acondicionado. Al respecto, desde la Junta recuerdan que el golpe de calor es un síndrome grave que se produce por un fracaso de la termorregulación por la exposición a unas altas temperaturas. 

El organismo no es capaz de controlar la temperatura corporal de forma que sube la fiebre a más de 41 grados centígrados. Los síntomas que hay que tener en cuenta son la temperatura del cuerpo, la alteración de la conciencia y la deshidratación. La Consejería de Salud y Bienestar Social insiste en la importancia de evitar la exposición a las altas temperaturas, ya que pueden suponer una agresión importante para el organismo. Por eso, como medida preventiva, aconseja no hacer ejercicio en las horas centrales del día, permanecer en sitio fresco, a la sombra y beber abundante agua. 
abc.es