El
Consejo de Gobierno ha reclamado "responsabilidad" a los sindicatos,
que hoy han iniciado un encierro contra esta medida
El Consejo de Gobierno del Principado
ha aprobado hoy la nueva jornada laboral en la sanidad pública para aplicar el
incremento de 35 a
37 y horas media semanales que requerirá "un esfuerzo" de los
trabajadores ante una situación "excepcional" de crisis y ha
reclamado "responsabilidad" a los sindicatos, que hoy han iniciado un
encierro contra esta medida.
El texto, aprobado sin contar con el
respaldo de ninguno de los sindicatos del sector, regula jornada ordinaria de
trabajo en centros de salud y hospitales y supondrá un ahorro de entre 13 y 17
millones de euros anuales a las arcas públicas.
De esa cifra, entre 4 y 5 millones de
euros procederán de la eliminación de las 'peonadas' que hasta ahora prestaba
el personal sanitario, fundamentalmente los médicos, por jornadas
extraordinarias en horario de tarde y que cobraban como horas extras, actividad
que ahora se incorporará al horario ordinario.
De esta forma, según el Gobierno, los
usuarios podrán ser atendidos en centro de salud y hospitales de forma programada
en un horario más amplio que incluye las tardes y los profesionales dispondrán
de más tiempo para tratar a los pacientes lo que permitirá reducir los tiempos
de espera para recibir atención.
En rueda de prensa tras la reunión del
Consejo de Gobierno, el consejero de Sanidad, Faustino Blanco, ha incidido en
que esta medida responde al objetivo general de cumplir el compromiso de
reducir el déficit público y busca además una mayor eficiencia en el uso de los
recursos con el objetivo de preservar el sistema público.
"Se trata de un marco excepcional
en una situación excepcional que busca garantizar la sostenibilidad del sistema
porque, si su sostenibilidad se somete a incertidumbre, se pone en riesgo el
propio empleo", ha apuntado Blanco.
El consejero ha asegurado además
sentirse "preocupado" por el encierro iniciado en la sede del SESPA
que es fruto, a su juicio, de que algunas expectativas sindicales no se han
satisfecho y de que el propio Gobierno no ha sido capaz de "comunicar la
realidad" en que se encuentran las finanzas públicas del Principado.
"La situación es difícil y la
contribución que pedimos a los empleados públicos es importante", ha
añadido tras mostrar su disposición al diálogo con los sindicatos a la hora de
aplicar de forma efectiva estos horarios en cuya negociación, y a pesar de que
ninguna central se ha sumado al acuerdo, ha asegurado que el Gobierno ha
incorporado algunas de las propuestas de estos.
Para Blanco, los nuevos horarios
determinan una jornada "lo mas uniforme y homogénea posible" en un
ámbito en el que resulta difícil hacerlo así debido a la diversidad de labores
de los distintos colectivos profesionales, a la realización o no de guardias y
la existencia de turnos rotatorios.
De esta forma, la jornada anual quedará
fijada finalmente en 1.650 horas frente a las 1.665 horas inicialmente
planteada por el Gobierno -1.519 hasta ahora- después de que los días 24 y 31
de diciembre pasaran a considerarse festivos y una vez aplicada la reducción a
tres del número de días de libre disposición decidida por el Ejecutivo central.
El consejero ha defendido que el
Principado ha cumplido "estrictamente" el marco legal que se le
demanda pero que también ha mejorado algunos aspectos de su propuesta inicial
relativos a la 'penosidad' que se aplica a los trabajadores con rotación
horaria para el turno de noche o a la bonificación de las guardias.
"Dialogar no es abdicar de la
responsabilidad sino que la responsabilidad sea compartida y ahora es el
momento de tomar decisiones con responsabilidad y sin dilatarlas en el
tiempo", ha advertido.
EFE