martes, 6 de noviembre de 2012

BREVES DE ACTUALIDAD: HAY DOS TRABAJADORES COTIZANDO POR CADA PENSIONISTA


La cobertura a desempleados baja pese a que sube el gasto contra el paro.


El desempleo llega los 4,8 millones.


La destrucción de empleo se agrava en octubre y marca nuevos mínimos.

Ya hay más de dos millones de parados sin prestación.

El desplome del mercado laboral es tan intenso y continuado —ya va camino del sexto año— que los casi 23.700 millones de euros gastados este año no bastan para evitar que cada vez haya más parados sin cobrar prestación o subsidio. El deterioro es de tal calibre que en septiembre la tasa de cobertura frente el paro cayó 63,5%, casi cuatro puntos menos que en agosto. No es el único punto por el que las costuras del Estado de Bienestar se están descosiendo. También lo hacen por el lado de la Seguridad Social, que ha visto como la relación entre cotizantes y pensionistas ha caído al nivel que estaba hace una década, lo que llevará este año sus cuentas a un déficit récord.
Octubre tampoco fue un buen mes para el mercado laboral español. Acabado el verano, el sector privado se volvió a sumar al público a la hora destruir trabajo y el desempleo repuntó con fuerza. El paro registrado creció en 128.472 personas y se situó en 4,8 millones, según publicó este lunes el Ministerio de Empleo. “No es un buen dato, como todos los que supongan que más personas buscan empleo sin encontrarlo”, definió la secretaria de Estado del ramo, Engracia Hidalgo.
Las consecuencias de estos datos van más allá del aumento del número de parados. El incremento constante de estos obliga al Estado a hacer un esfuerzo ingente para pagar el seguro de desempleo, ya que las cotizaciones por este concepto son insuficientes. A estas alturas de 2012, el Gobierno ya se ha visto obligado a admitir que su previsión en esta partida es insuficiente. Según su estimación inicial, en 2012 el gasto por prestaciones bajaría un 4,5%; hasta septiembre crecía un 5,9%.
Este lunes la secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, confirmó que ya han solicitado a Hacienda el crédito necesario para poder acabar el año ya que con los 28.500 millones presupuestados no habrá suficiente. De seguir aumentando el gasto a este ritmo, el desembolso total rozará los 32.000 millones, más que en 2011 y poco menos que en 2010, el año que más dinero hizo falta en este capítulo.
Pero la duración de esta crisis muestra una cara más dramática que la de las cuentas públicas, la de los parados que ya no tienen derecho a percibir la prestación y el subsidio. En septiembre, último mes con datos disponibles, superaron los dos millones. Este número no tiene en cuenta a los beneficiarios de las subvenciones del Plan Prepara, cuyas condiciones de acceso fueron endurecidas en agosto y del que Empleo no facilitó cifras. Contando con ellos ellos, la cifra baja, aunque no de forma muy significativa. Aunque si la cifra se calculara sobre la base de parados de la Encuesta de Población Activa (EPA), el número de desempleados sin prestación o subsidio andaría por los tres millones.
El desplome del mercado laboral también se deja sentir en el otro gran pilar del Estado de Bienestar: la Seguridad Social y el sistema de pensiones. En un año, el instituto público ha perdido 623.586 afiliados; en octubre contaba 16,7 millones. La sangría del empleo ha hecho mucha mella en una relación básica para la sostenibilidad del sistema: el número de cotizantes por pensionista.
Esta ratio se situó en octubre en 2,36 cotizantes. Es el nivel más bajo desde 2002. No obstante, este cociente disimula, en parte, la realidad ya que se calcula teniendo en cuenta a todos los cotizantes, tanto a los que trabajan como a los parados que perciben prestación o subsidios, por los que cotiza el servicio público de empleo. Si se descuentan estos últimos, entonces el cociente cae hasta los 2,03.
Los números de octubre muestran, una vez más, el deterioro vuelve a intensificarse en otoño. Finalizada la temporada alta del turismo, la hostelería, que perdió 56.621 afiliados, se suma a la destrucción de puestos de trabajo, también el comercio (-16.937). Estas ramas de actividad se sumaron a la sanidad y los servicios sociales, muy vinculada al empleo público y que perdió 43.301 afiliados.
Con estos datos, la patronal CEOE volvió a reclamar “flexibilidad laboral y moderación salarial” para hacer frente a la coyuntura. No obstante, en esta ocasión hubo un matiz respecto a su demanda tradicional ya que lo hizo “conforme a los criterios del II AENC [el pacto firmado entre CEOE y sindicatos]”, es decir, pactada entre empresarios y trabajadores.
UGT, por su parte, aprovechó las cifras del desempleo para decir que no hay brotes verdes y llamar a la huelga general del 14-N para cambiar las políticas del Gobierno. En la misma línea, CC OO defendió que el Ejecutivo está “anteponiendo políticas de recortes frente a las necesidades de las personas”.
http://economia.elpais.com/economia/2012/11/05/actualidad/1352147722_256839.html