Los padres que renuncien a usar la
guardería pública recibirán 100 euros al mes
La coalición de Angela Merkel suprimirá el copago trimestral por
recurrir a la sanidad pública en Alemania. A partir de 2013, los pacientes
alemanes no tendrán que abonar 10 euros trimestrales por ir a la consulta
pública. Esta modalidad de copago sanitario estaba en vigor desde 2004 y obliga a
los enfermos a pagar la cantidad fija de 10 euros por cada trimestre de
necesitar atención médica. El pago aumenta en otros 10 euros cada vez que el
paciente acuda a un especialista sin volante de su médico de cabecera. Esto
incluye el servicio de urgencias de los hospitales. En 2013, año electoral en
Alemania, la atención sanitaria volverá a ser completamente gratuita para los
asegurados en las mutuas públicas. Los pacientes se ahorrarán unos 1.800
millones de euros anuales.
El
ministro de Sanidad, el liberal Daniel Bahr (FDP), presentó los textos legales
para suprimir el copago a los líderes de la coalición de centroderecha de la
democristiana Merkel (CDU) en su reunión de la madrugada del lunes. El Consejo
de Ministros los aprobará este miércoles. Los representantes de los tres
partidos que conforman el Gobierno de Merkel se reunieron en Cancillería hasta
bien entrada la noche para debatir la reforma. También decidieron un ligero aumento
de algunas de las pensiones más bajas, así como una nueva subvención a las
familias que asuman en casa el cuidado preescolar de sus hijos.
Esta
fue la decisión más controvertida de la reunión nocturna entre representantes
de la Unión Demócrata
Cristiana (CDU), su partido hermano bávaro (CSU) y el liberal FDP. A partir del
1 de agosto de 2013, los padres que renuncien a
enviar a sus hijos a la guardería pública percibirán 100 euros mensuales durante 12 meses desde que el niño
cumpla un año. En 2014, la subvención se prolongará durante 12 meses más. A
partir de agosto de ese año ascenderán a 150 euros mensuales. Según sus
críticos, la polémica medida perjudicará la integración de los niños cuyas
familias no hablen alemán como lengua materna. Al incentivar económicamente que
los pequeños se queden en casa, esta subvención contribuirá, además, a que
muchas madres jóvenes renuncien a incorporarse al mercado laboral, opinan los
detractores.
Además, el Gobierno quiere que quienes hayan cotizado 40 años y cobren menos de 688 euros mensuales perciban un pequeño subsidio cuyo montante aún no ha sido fijado. Según el Ministerio de Trabajo, podría llegar a redondear estas pensiones hasta los 850 euros mensuales.
Además, el Gobierno quiere que quienes hayan cotizado 40 años y cobren menos de 688 euros mensuales perciban un pequeño subsidio cuyo montante aún no ha sido fijado. Según el Ministerio de Trabajo, podría llegar a redondear estas pensiones hasta los 850 euros mensuales.
La retirada
del copago sanitario afectará en primer término a las mutuas públicas de
seguros, que deberán aumentar los pagos a los médicos que se quedaban con los
10 euros trimestrales como parte de su retribución. Este aumento del gasto en
las cajas se verá compensado con dinero del gran fondo común dependiente del
Ministerio de Sanidad. El copago se introdujo con el fin de reducir la tasa de
consultas médicas innecesarias y para evitar que los enfermos recurran
directamente a los especialistas sin pasar por el médico de cabecera. La intención
era que el médico de familia sirviera de filtro que evite consultas superfluas
con especialistas.
En
este sentido, el copago fue un fracaso notorio. Según datos de Sanidad, el
número de consultas no se vio afectado y sigue superando los 500 millones
anuales. Eso sí: diversos estudios apuntan que el copago solo disuade de buscar
ayuda médica a las familias con ingresos muy bajos, aquellas para las que 10
euros trimestrales por paciente suponen un desembolso importante. Además, cada
médico invierte unas 120 horas de trabajo anuales solo en organizar el cobro y
la facturación de los 10 euros de copago: sumado, este tiempo alcanza la
friolera de 360 millones de euros.
Los
grupos parlamentarios alemanes debatirán esta semana el proceso para liquidar
el copago sanitario, del tal modo que la reforma legal pueda ser debatida y
aprobada este mismo viernes por el pleno de la Cámara baja (Bundestag). En
2013, Merkel se juega su tercera legislatura al frente del Gobierno alemán. El
socialdemócrata que competirá con Merkel, Peer Steinbrück (SPD), se apresuró a
criticar las nuevas medidas como “regalos electorales”. Los votantes, auguró
sin embargo, “no se dejarán comprar”.