BELÉN RODRIGO / CORRESPONSAL EN LISBOA
Día 17/03/2013 - 03.01h
Con
el compromiso firmado se espera reanimar el sector que representa 20% de las
empresas nacionales, emplea 635 mil trabajadores y es responsable del 18,2% de
la riqueza generada por el país
A finales del 2012 la deuda a los bancos de las empresas de
construcción y de actividades inmobiliarias en Portugal se aproximaba a los 5,5 mil millones de euros.
Desde que comenzó la crisis la construcción y el inmobiliario han sido los dos
sectores más castigados tanto por la falta de inversión pública como por la
casi ausencia de proyectos privados. El resultado ha sido un aumento de número
de insolvencias, desempleo,
créditos en incumplimiento, dificultades en tesorería y atrasos en los pagos.
Ante este escenario, el Gobierno portugués ha decidido dar un balón de oxígeno
a estos dos sectores. El mensaje es claro, hay que relanzar el sector, apostar
en la formación profesional, en la internacionalización y rehabilitación
urbana.
El Gobierno y la Confederación Portuguesa
de Construcción y del Inmobiliario (CPCI) han firmado el llamado “Compromiso
para la
Competitividad Sustentable del Sector de la Construcción y del
Inmobiliario”. Se trata de un acuerdo que comprende 52 medidas de apoyo al
sector que desde hace tiempo pide ayuda para superar los problemas y relanzarse
a nivel nacional e internacional. Un acuerdo del que se ha llegado a decir que
es “histórico” pero dentro
de los sectores involucrados saben que hace falta coraje y determinación para
que se puedan poner en marcha las medidas. Con el compromiso firmado se espera
reanimar el sector que representa 20% de las empresas nacionales,
emplea 635 mil
trabajadores y es responsable
del18,2% de la riqueza generada por el país.
Para el
ministro de Economía y del Empleo, Álvaro Santos Pereira, este compromiso “es una agenda cohesiva y ambiciosa, es
un paso concreto y real para la reforma y el relanzamiento sostenible del
sector”. Ya el secretario de Estado adjunto de Economía y Desarrollo Regional,
Almeida Henriques, afirma que este plan “responde a las exigencias del momento
pero proyecta una visión sobre el futuro”. El
periodo de ejecución será de 2014
a 2020.
Combatir el paro
Entre las medidas aprobadas se encuentra la redistribución de 3700 millones de euros del cuadro de referencia
estratégica nacional, el llamado QREN, en infraestructuras
y equipamiento. También uno
de los puntos principales de este acuerdo es la creación de empleo. Los niveles
de paro en la construcción son alarmantes. Según el presidente de la CPCI , Rei Campos, “el
sector representó 26% del total del paro del país en 2012, con más de 114 mil
desempleados”. Y el ritmo de destrucción de empleo en el tercer trimestre
del pasado año fue el más asustador, con 46 mil personas, es decir, el 55,8%
del total de los puestos de trabajo perdidos en dicho periodo.
Con el compromiso firmado se pretende “recuperar 85 mil
puestos de trabajo en los próximos dos años y
evitar que la tasa del paro nacional alcance el 20% y que el sector pierda los
140 mil puestos de trabajo que están en riesgo”. Este programa cuenta con más
de 351 mil trabajadores como
albo potencial ya que
“pretende crear también cualificaciones y competencias para la reorientación
del tejido empresarial para áreas como la rehabilitación urbana, la
construcción sostenible y la eficiencia energética”.
El programa incluye igualmente la dinamización el acceso de las
empresas de construcción a las líneas de financiación “PME Crecimiento”. En el 2012 esta
línea pasó a incluir este sector, con una contribución de cerca de 200 millones
de euros.
Inmobiliario
La rehabilitación
urbana y el alquiler son las
dos principales apuestas de este compromiso. Se quiere crear una tasa autónoma
aplicable a los rendimientos del mercado de alquiler. Los particulares se van a
poder presentar como candidatos a la rehabilitación de casas, y se beneficiarán
de condiciones de financiación más ventajosas. En este sector los subscriptores
del acuerdo creen que la internacionalización va a ser decisiva para contornar
la coyuntura doméstica.
El programa de rehabilitación urbano conocido por “Jéssica”, permitió la utilización de 335 millones de euros de
financiación QREN para apoyar
actividades de dicho sector. Hasta finales de este semestre se van a firmar
proyectos de 188 millones de euros. Dado el éxito de esta iniciativa, el
Gobierno estudia alargarla a otras áreas, como la logística, y direccionarla
para la financiación de particulares que quieran rehabilitar sus edificios, a
través de sociedades de rehabilitación urbana (SRU). Y se espera un nuevo
programa de financiación de particulares en la rehabilitación de inmuebles para
alquiler.